De la necesidad y otras ciencias no tan necesarias

El tedio, el odio y el fastidio han hecho presa fácil de éste quien escribe. Pero la necesidad es como el hijo pródigo que siempre vuelve a casa y se reencuentra con el padre castigador que es vencido por la melancolía y decide perdonar.


Ahh!, la necesidad. Palabra ésta bastante exótica, tal como diría mi amiga la inquisidora. Se puede llegar a necesitar un abrazo, una fotocopiadora, un vaso de agua o incluso el sexo de apareamiento (lo cual justificaría endógenamente la presencia de las de su género en el universo). La necesidad se convierte en una necesidad y es allí donde surge la línea tácita que divide a la absurda costumbre de la sensación asfixiante ante la ausencia de algo realmente necesario, y vamos allanando un camino para darle vía libre a la manipulación de cuanto satisfaga esta necesidad.

De otro lado aparece la necesidad de justificar la necesidad para caer en un círculo vicioso ultramundano y ridículamente verídico que podría demostrarse valiéndose de los axiomas básicos de la lógica indispensable (ciencia creada y autodictaminada por mí, en mí y para mí.):

Sea p un argumento lógico válido que demuestre q, y sea r el valor de necesidad de p se puede concluir que p implica q sí y sólo sí r implica la existencia de p. Pero r tiene como finalidad q, así que la existencia de p está fundamentada en la necesidad de q, por lo que se puede concluir cualquier cosa ya que q necesita a p, p necesita a r y por modus tolendo tolens y ley transitiva q necesita a r, pero r está estrechamente ligada a la voluntad humana denominada h, y h es muda, ciega y sorda, entonces concluimos que Shakira es una gran intérprete de la canción postmoderna, y hemos llegado a una contradicción, lo cual en una reducción al absurdo es algo tan válido como decir que existe algún judío que no pretenda ser una víctima de las circunstancias, y así llegamos a la premisa que queríamos demostrar, que de algo tan incierto y obtuso como la necesidad podemos concluir algo tan vago e inútil como lo que queremos necesitar.

“Teorema único de la necesidad en la lógica indispensble”


Surgen entonces las preguntas necesarias para justificar la necesidad que siente mi cerebro Calasanz ante las inquietantes apariciones fantasmagóricas. ¿Por qué necesito las palabras de un otro para corroborar que la incertidumbre es un mal contagioso?. ¿Por qué necesito una presencia opaca para buscar las ansiadas penumbras del devenir?. ¿Será acaso que el Demiurgo me está recompensando por tantos lustros de estulticia púbica y me crea ahora la necesidad de la sabia justicia?. Estos efímeros destellos de genialidad que cruzan por mi mente tal vez sean plausibles debido a la necesidad de alguien de necesitarlos y a mi necesidad de que alguien los necesite, pero de cualquier forma son verídicos y demostrables, lo cual la necesidad todavía no puede alcanzar pues la tangibilidad y el facto son cualidades que poseo, pero que no necesito…


¡Versículo musicalizado por!
  • Bush - Glicerine
  • Portishead - Glory box
  • Depeche Mode - Everything counts

2 herejes se han manifestado:

Astrid dijo...

yo creo

Astrid dijo...

la casa desaparecida... es que està sonando.

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